Los valores – 30
Los valores familiares
Ayudar en cada tarea de la casa
En la casa viven varios o muchos. Cada uno trabaja en lo suyo, o estudia lo propio. Sin embargo, el trabajo o el estudio no son excusas para desentenderse de los trabajos comunes. Es decir, hay tareas que tocan al Bien común, de las cuales no podemos despreocuparnos. Por ejemplo. Hay que hacer compras, hay que limpiar, hay que ordenar, hay que cocinar, hay que pagar facturas, hay que llamar al plomero, hay que llamar a gasista, hay que llamar al del aire acondicionado, hay que regar las plantas, hay que ocuparse del lavarropas.
La casa es un pequeño mundo. Como dioses le ponemos un orden. Luego pasan cosas inevitables como a Dios. Entonces usamos la mente que nos dio para solucionar lo posible.
Mucha gente vive con este valor familiar, sin protestar. Debe ser algo de Dios, autor de las maravillas. Es emocionante ver a los esposos ayudar a sus mujeres en el cuidado de los nenes. Es lindo ver que los hermanos se ayudan en las tareas. Es mágico cuando te agradecen las nueras: inesperado. Es chocante cuando las nuevas “esposas” dicen: “Son tus hijos anteriores. Arreglate”.
