Ultima característica del amor humano: deseo y don
Hasta ahora presenté estas características del amor humano: pasividad y actividad;
unión y movimiento; afectividad y libertad; espíritu y carne. Falta una última: la más
importante porque nos da el sentido del amor. ¿Esas características se encierran en la
persona o se abren a los otros? ¿Cómo se responde? Que el amor es deseo y don a la
vez. El amor implica un movimiento de deseo, porque somos creaturas y por lo tanto
indigentes, y eso nos define. Hay en nosotros un movimiento de desear poseer lo que
nos falta y buscamos lo que puede llenarnos. Además, tenemos un movimiento de don
y entrega, más esencial que el deseo, porque todo lo que tenemos nos viene de Dios.
Amamos uniendonos a nuestro Todo infinito que es Dios. En El encontramos la fuente
y la finalidad de nuestra existencia. Así nuestra alma no es alma sin olvidarse de si
misma, si no se entrega. El amor se completa en la comunión que me vincula a otros, o
me vincula a Dios como quien me conoce mejor que yo.