Relación de la Esperanza con el temor de Dios
La Esperanza y el temor de Dios están implicadas mutuamente. El punto de unión
entre la Esperanza y el temor es el amor que busca a Dios en cierto modo egoísta.
Sólo se puede esperar y temer en relación a uno mismo o a la persona amada.
El temor servil corresponde a la Esperanza que aún no ha sido transformada por el
amor de amistad hacia Dios.
El temor de Dios asegura que la Esperanza es auténtica. Excluye el presumido
anticipo de la salvación eterna. El temor de Dios nos mantiene alerta en el camino
hacia la felicidad, que aún no hemos alcanzado. Porque la vida humana, aunque está
orientada por Dios hacia la plenitud que no tenemos, está amenazada en nuestro
estado actual de caminantes por la proximidad de la nada. El temor protege la
esperanza. Por eso dice el salmo 113: “Esperen en el Señor los que le temen”. +