Nuestra Señora de Luján
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La presencia de la imagen de Luján es global en la Argentina. La historia de Luján
echa sus raíces con esa imagen en la historia argentina. Es 1630. Una carreta. El Negro
Manuel. Doña Ana de Matos. No es una aparición y no hay mensaje: sólo es una
presencia. Durante casi 400 años Luján ha sido y es lugar de consuelo, curación,
misericordia y presencia amiga. La memoria cristiana del pueblo argentino ha
guardado esa presencia. En 1974, en tiempos turbulentos para la nación, los jovenes
descubrieron el valor de Luján. Hay católicos que no saben el nombre de su parroquia
pero cada año van a Luján, como quien busca un refugio seguro y vuelve a la casa
paterna.