LÍDERES COMO JESÚS:
Jesús pidió ayuda para una causa noble: la salvación humana. Los líderes piden ayuda para causas nobles. ¿Qué nos impide pedir para causas nobles? ¿El qué dirán? ¿El juicio de los demás sobre nosotros? Por nuestro miedo, miles de personas sufren las consecuencias del abandono social, la marginación y el olvido.
¿Cuáles son tus causas nobles? ¿Has pedido alguna vez para una hermana misionera que trabaja en la selva? ¿Has pedido por un sacerdote cuya parroquia queda en los confines de las provincias y hace 26 años que lucha por elevar a la gente? ¿O te da vergüenza? ¿Qué van a decir de vos: eso sólo lo hacen los curas y las monjas?
Necesitamos discernir y reconocer a quien pide para causas nobles. Ampliar colegios y universidades, decorar escuelas y comprar campos de deportes son buenas causas. Jesús, sin embargo, pediría para la Hna. Ana María que trabaja con los indios guaraníes en la selva misionera, y para el P. Juan Carlos que ha dejado su vida entre los pobres del norte santiagueño. Las causas de esa hermana y ese pobre cura son nobles y necesitamos apoyarlas, en el nombre de Jesús.