Lento regreso a las devociones
Las devociones siguieron practicándolas quienes las conocían , pero no hubo
descripción ni ejemplos concretos de estas a niños y jóvenes, en un lenguaje
adaptado a su Fe y a su visión del mundo.
Hoy en día, muchos católicos entre 20 y 50 años de edad han redescubierto el valor
de las devociones. Estos católicos sienten que alguna de esas devociones está dando
significado a su vida y que los acercan más a la Misa, la Confesión y los demás
Sacramentos. Y muchos piensan que las devociones podrían dar sentido a la vida de
otros católicos que se aburren en las Misas y con las prédicas de muchos sacerdotes.
La celebración de la Liturgia no puede ser rápida y sin el suficiente tiempo de
meditación, oración silenciosa y acción de gracias. Y sobre todo, que las palabras
oficiales se pronuncien de tal manera que se puedan entender en su contenido
espiritual. Eso requiere preparación del sacerdote y los lectores y cantores. Es mucho
trabajo.