Evitar a los líderes egoístas

Evitar a los líderes egoístas

Es urgente reconocer a los líderes egoístas porque tienen una peronalidad
atractiva, pero son un peligro para la institución en la cual trabajan. Los efectos
negativos se notan en su equipo. Los síntomas de un egoísta van apareciendo y dañan
a los demás. Sus conductas crecen peligrosamente.
Doy una lista de las señales para reconocer al egoísta.
1o. Los líderes disfrutan del éxito de sus compañeros. Los egoístas tienen envidia del
éxito ajeno. En cambio, es preciso apreciar y valorar el trabajo de los integrantes de tu
grupo.
2o. Un egoísta está ocupado cuando sus compañeros lo necesitan. En seguida lo
captas: está distante, distraído, preocupado. Por eso, es necesario que los verdaderos
líderes trabajen para inspirar y motivar a los demás tanto de modo personal como de
modo grupal. Se necesitan leales compañeros que detecten las necesidades del grupo
para atenderlas enseguida.
3o. Los egoístas andan discutiendo, porque piensan que nunca se equivocan y tienen
la razón. Son rígidos y dominantes. Son conflictivos y les cuesta encontrar los puntos
de acuerdo.
4o. Pueden reconocer a los egoístas, porque se protegen y defienden, y a veces
trabajan en contra de aquellos a quienes deben animar e impulsar.
5o. Interrumpen a los demás, no les interesan que las ideas geniales de otros se
pierdan. Como no escuchan a su gente, los demás optan por el silencio. Eso es mortal
en una institución.
6o. A los egoístas les gusta promocionarse y no elevar a los otros.
7o. Lo último: la falta de amor hacia los demás, esconde a menudo la falta de amor a sí
mismos. Esa actitud es destructiva y harán bien los directivos en suprimirlos. No
cambian. El ego los secuestró. Se requieren líderes que den ejemplo e inspiren.
Osvaldo Santagada

Post a Comment

#SEGUINOS EN INSTAGRAM