EL CATECISMO
Algunos niños hacen su Primera Comunión. Si la vida cristiana se reduce a «recibir» un rito en determinados momentos, hemos caído en un ritualismo vacío, en el cual Dios no ocupa su lugar. De allí a desalojar a Dios de la vida, hay un paso. Y lamentablemente, ese paso se está dando.
Más importante que el Catecismo es el ejemplo de los propios padres en las cuestiones religiosas. La religión no es una cosa que se pone y se saca: la religión es algo que modela nuestra existencia. Si los niños no ven a sus padres varones junto a ellos en la Iglesia, ¿cómo creerán después y cómo podrán ser católicos activos?
Los fieles de San Gabriel Arcángel pueden hacer varias cosas por el Catecismo:
1. Los varones que vienen a Misa los domingos, pueden dar ejemplo de oración y actividad en el seno de la comunidad.
2. Los jóvenes, varones y mujeres, pueden animarse a ser ayudantes del catecismo: estar con los niños de su generación les hará bien y ellos harán el bien.
3. Cada fiel católico puede orar por las catequistas, por los niños, por las familias inactivas en la fe; podemos dar el ejemplo de integrar algún grupo parroquial para levantar la fe.