Dirigir la estrategia hacia resultados de excelencia

La misericordia exige decisiones

Dirigir la estrategia hacia resultados de excelencia

La excelencia consiste en disponer productos o servicios de calidad, desarrollar una gestión financiera sólida y dar a los clientes lo valioso. Para lograrla se precisa:

  1. Tener una visión clara de la organización, compartida por todos.
  2. Construir un equipo de gente de talento, que trabaje bien unido. Lograr eso es una estrategia básica. No sólo talentos individuales, sino de los equipos de la empresa.
  3. Crear una cultura que tenga tres metas:

a) conseguir los objetivos que se desean

b) buscar la innovación y el mejoramiento del producto o servicio.

c) rechazar la mediocridad y establecer claramente los objetivos, dentro de la realidad social y económica del momento.

  1. Fomentar una amplia comunicación a nivel interno y externo. La comunicación es la que respeta a todos y sea constructiva. Sin comunicación se hace difícil el trabajo en equipo y el logro de los objetivos. Hay que implantar buenos canales de comunicación y favorecer la competencia del personal en sus campos.
  2. Aceptar la “voz del cliente”como instrumento para gestionar las expectativas y lo que desea el conjunto de los clientes reales de la empresa.
  3. Establecer un estilo de urgencia para desarrollar los planes y proyectos. Eso sirve para eliminar los factores internos o externos que dificultan la realización de la estrategia. Hay que establecer un sistema para identificar, priorizar, tomar medidas y evaluar. Eso lleva a la excelencia.
  4. Conocer bien la experiencia de los clientes y crear vínculos con ellos. Eso nos permite diferenciarnos de la competencia y alcanzar su fidelidad. Conocer de modo adecuado a los clientes y ofrecerles lo que ellos valoran de nosotros.

Osvaldo Santagada

Blog 20

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