
Diferencia entre el miedo y el temor de Dios
Es importante distinguir entre el miedo y el don del temor de Dios. No son lo mismo.
Se puede interpretar mal la Biblia con respecto al temor. Por eso, algunos catequistas
y sacerdotes no hablan del temor, que viene del Espíritu Santo. No nos asustamos a
causa del temor. El temor de Dios es el don de respeto y humildad ante el poder y el
amor de Dios a nosotros. Para seguir a Cristo necesitamos el temor del Padre, porque
si presumimos de no tener temor, no somos nada.
Tener miedo no es lo mismo que sentir temor ante Dios. El miedo es una reacción del
cuerpo ante situaciones de emergencia. Puede dominar los sentidos si no sabemos
controlarlo. Para el miedo, Dios nos pide fortaleza, sin sentirnos amenazados. El temor
de Dios, en cambio, es la expresión respetuosa del alma, que sabe que es una creatura
limitada. El temor de Dios es un acto de humildad con el cual alabamos las maravillas
que hace el Señor. No tememos por miedo, sólo tememos por amor a Dios.