¿Cuál es el principal valor?
La regla absoluta en el orden de los valores, nos indica buscar ante todo a
Dios. Atendemos enfermos, damos de comer al hambriento, porque amamos a
Dios. El amor de Dios tiene un primado absoluto, porque unifica toda nuestra
actividad. Es un amor orientado: lo temporal viene de Dios y va hacia El. El
amor de Dios es un camino que da sentido a todo lo que vivimos. Amamos lo
temporal como servidores; usamos los valores temporales para aspiraciones
más altas: sacrificarnos, ayudamos, compartimos, no nos dejamos someter y
permanecemos fieles a Dios. Amamos lo material para que nos ayude a unirnos
a Dios. Así podemos sacarnos todo lo inútil y no vivir en la codicia. No nos
dejamos dominar por las cosas. Usamos todo sabiendo que el premio de Dios
es más grande. Condenamos con energía no el amor a lo temporal, sino la
idolatría de lo temporal.