Amor y Alegría, edición del mes de agosto

¡Cuidado con los profesores!

 

Maestros y profesores pasan un prejuicio contra la Edad Media. Ese prejuicio brota de un desprecio por la Iglesia y es un grave error. Afirman que la Edad media fue una época sombría y de oscurantismo, un paréntesis que se dio lo antiguo y lo moderno. Eso es una falsedad inventada por historiadores y transmitida por quienes deben buscar la verdad.

 

El primer ejemplo es la música. Si se comparan las músicas de la edad antigua, china, persa, egipcia, hindú, griega y romana se hallan parecidas.. Sólo en la Edad Media surge el canto gregoriano y la polifonía. Así la música occidental creció tanto que no se puede comparar con otra. Hay una historia de la música en occidente pero no de otras partes.

 

La Edad Media está llena de aventuras y hallazgos, base de nuestro progreso. ¿Quién se atreve a negar el arte arquitectónico que hizo las iglesias góticas? ¿Dónde hallar sus cúpulas gallonadas, bóvedas de crucería, cresterías, contrafuertes, arbotantes, contrarrestos, unidos en un fino dinamismo que hasta los ingleses del s. XIX imitaron?

Además la Edad Media es pródiga en inventos técnicos, el tornillo, la polea, la silla de montar, el jabón como detergente, la piedra de afilar rotatoria, el telar mecánico, los anteojos con aumento, la carretilla, el reloj de ruedas y pesas, los altos hornos, la quilla y el timón sin las cuales no se habría descubierto América. La lista es inagotable y en  otras notas el invento de los hospitales, las escuelas monacales, la notación musical perdurable.

 

 

Amor y Alegría

 

 

Por más de 20 años se editó la revista La voz del Peregrino, o solo El Peregrino. Ese título es tan vago como el de los diarios. Se pensó que nuestra revista debía tener voces claves que señalen lo que falta la sociedad argentina.

 

Por eso, desde agosto de 2019 se les presenta la revista que tiene notas para la vida de la fe y de cada día. Su nombre es AMOR Y ALEGRÍA.

Todo esto brota de la misma matriz que es el amor a Jesús. En El hallamos la paz que el mundo no sabe dar, el amor que supera la avidez, y la alegría ausente en esta vida social. En Jesús cambia el  horizonte y se logra calma ante las pruebas;  somos capaces de decir lo que sentimos; hallamos una agrado del alma que nos hace vencer un problema sin caer enfermos.

 

La matriz de la que se habla la hallamos en las palabras de Jesús, que la comunidad católica pasó desde el inicio.

 

Luego en la historia de la Iglesia, el Espíritu Santo hizo brotar un tesoro de santos que pasaron  la Fe a las distintas culturas. En ese tesoro de ideas  vamos a buscar lo nuevo y lo viejo. No sólo cambia el nombre, sino que para vino nuevo se usan odres nuevos.

 

 

¿Qué hacer después del fracaso?

 

 

 

 

Hay que retirarse al silencio para recobrar fuerzas.

 

Ante un revés, muchos se abaten.  Es un gran bajón, una pérdida de empuje, un  olvido del pasado y del futuro. Viven en el hoy y contestan como robots.

 

Hay muchos golpeados por un accidente, una enfermedad o una derrota. A veces pasa que las desgracias llegan de a dos. La gente se quiebra y se oculta. Huye el contacto social. Llegan a orar, pero sólo si no hay nadie.

 

Después de un tiempo recuperan su fuerza, se curan e inician algo con ganas.

 

Ese tiempo de «bajón» es un mecanismo de defensa para frenar la acción hasta que podamos recobrar la vida. Es un retiro útil,  como hacen los animales heridos.

 

Algunos se enferman por el fracaso. Se encierran, quedan con miedo por  lo que les pasó y cortan el amor y la amistad.

 

V. Frankl estuvo en un campo de concentración y perduró por que halló el  sentido a la vida, hasta en los peores momentos. Volvió y se dedicó a ayudar a los demás.

 

Algunos sufren cosas que claman al Cielo. Y  si les toca actuar, con sencillez muestran que se puede renacer pese a los fracasos.

 

El bajón  es como un sueño que nos fortalece. Algunos piensan que a los decaídos les falta brillo y vida intensa. No hagan  juicios rápidos. Son famosas los  dichos: pese a su edad, brilla su mente, pese a sus pena pesar su ánimo no decayó”.

 

 

Los chicos de 13

 

 

 

 

«Paciencia con los errores que cometimos»

 

¿Edad difícil? ¿Edad de la pavada? ¿Cómo viven los chicos de 13 su marcha de la niñez? A esa edad, ya han tragado los valores que se les dieron. Si no se hizo antes, ahora es tarde. Como en el tema de la mente: si no repasaron y rehicieron desde niños, y si no preguntaron para saber, se quedan en los juicios tontos.

 

Los padres casi no se ocupan de sus hijos de 13: sólo tienen “miedo” a drogas, violencia y sida. Sufren el celular cada día. El problema  comienza cuando captan que sus padres se pelean, que no sufren la verdad del otro. Entonces se apartan de ellos y se acercan a otros chicos: quienes usan su ropa, oyen su música, toman sus bebidas, gustan sus comidas y hablan de sexo.

 

Ven el mundo según lo que oyen: insultos, protestas, corte de servicios, grosería, interés por el dinero, pavadas de la tele. Se insertan así en un mundo que sienten sucio y, por eso, les gusta diversión, dormir, salir con los amigos. Se hartan del estudio: sólo el 30% dedica más de 1 hora por día. Odian a profesores y colegio. Les molestan las órdenes.

Si comienzan a faltar a Misa, tienen una Biblia, o un Rosario, aunque ni se imaginan lo que significan ambos símbolos. Hay sacerdotes hábiles que saben hablarles sin enojarlos, pero ¡pobre quien se atreva a decirle las verdades! Cuando se mueren sus abuelos o un compañero, entonces, sienten un gran intenso y preguntan sobre el alma inmortal y la bondad de Dios ¿Nos vamos a encontrar otra vez? Con esas preguntas, si la familia carece de la Fe, se malogran, y desafían las ideas de los demás y eligen lo que no son.

 

Entienden un solo lenguaje: la música.  Aunque se porten de modo salvaje, pueden tener un hondo amor a Jesús; necesitan dormir mucho; y mucho ejercicio físico.

 

 

¿A qué edad está completo el cerebro humano?

 

 

 

 

Jay Giedd y su equipo exploraron hace unos años a bebés y mapearon su cerebro. Al otro año hicieron lo mismo con bebés de un año. Luego siguieron con los del primer año. Así buscaron, hasta llegar a la certeza de que sólo a los 25 años se forma la corteza frontal, que es el gerente del cerebro. La corteza prefrontal, detrás del hueso de la frente, es lo último del cerebro en formarse para hacer las conexiones de neuronas con las demás partes.

 

Hallaron  que el cerebro se forma de a poco de atrás hacia delante, hasta llegar a la corteza prefrontal. Hay una  sola parte que crece también hasta los 25 años: es el cerebelo. Juega el papel de entrenador físico y regula los procesos mentales. El cerebelo es más sensible al ambiente que a los genes, por eso es el soporte de altos saberes  como matemáticas, música y capacidad social. El cerebelo cambia durante la adolescencia, y aumenta el número de neuronas y sus conexiones complejas.  La corteza prefrontal y el cerebelo son las dos únicas partes del cerebro que crecen hasta llegar a su madurez.

 

Estos datos son  graves para los chicos y sus padres. Puede haber algunos que sepan jugar a la pelota a los 19 años, pero sus decisiones no son racionales, y por eso, morales, hasta los 25. Muchas chicas son grandes a los 17 años, pero su mente está dominada por su sentido romántico y pueden cambiar apenas llegan a la madurez.

 

Los preceptos de Dios no son para niños, sino para adultos. Hay que enseñarlos a practicar desde la niñez. Si no, habrá desilusiones y se caerá en desastres: el alcohol y las drogas. Los padres mediten esto y frenen los deseos ávidos e irracionales de sus hijos.

 

 

¿Resucitarán los cuerpos?

 

 

 

 

Espero resucitar después de la muerte. Espero que la constante enseñanza de la Iglesia sea verdadera, y que al fin de los tiempos, vamos a resucitar con el cuerpo.

 

La resurrección del cuerpo es una doctrina no negociable para cada cristiano desde hace dos milenios, pero me cuesta hallar  hoy a uno que crea en ella con fervor. Al rezar el Credo, el pasaje entre la comunión de los santos, el perdón de los pecados y  la vida perdurable  no parece impresionar a nadie. Es algo que se dice, pero no asume.

 

Al referirnos al más allá, millones de católicos que van a Misa, piensan que lo único que vale son sus almas.  No tienen problema en pensar que después de su muerte quedarán libres para siempre de su cuerpo molesto.   La idea – la materia es mala y sólo nuestros espíritus son valiosos – es una herejía que los Padres de la Iglesia intentaron expulsar de la fe cristiana desde los primeros días. Esa herejía se llama “gnosticismo”.

 

¿Por qué la resurrección corporal no interesa, mucho menos alegra a la gente que es bastante devota. ¿Qué tiene de malo? Desde el principio, la fe  en la resurrección del cuerpo encontró incomprensión. Se acepta que, después de la muerte, la vida del hombre sigue de forma espiritual. Pero ¿cómo creer que este cuerpo mortal pueda resucitar a la vida eterna?”

 

Hay varias razones por las cuales no pueden aceptar esta doctrina de la Fe. Se refieren a la biología, la física y la química. ¿Cómo puede algo muerto, vivir de nuevo? ¿Cómo pueden revivir las células ya desintegradas? Hay cosas difíciles de explicar por la ciencia, que los católicos creen: la presencia substancial de Cristo, el parto virginal, y otras.

 

 

¿Cómo armar un equipo eficaz y con valores? Por O. Piñeiro

 

 

 

 

Un científico vivió por años entre pigmeos. Mostró que aunque por fuera parecen sin orden, esas tribus se basan valores que garantizan la unión y eficacia en el trabajo. La clave es armar buenos equipos:

1.  

 

1. 1. Respeto. Son gente feliz. La familia predispone a compartir y colaborar. Todos saben que dependen de otros para sobrevivir. Cazar es peligroso: hay que  contar con todos. Los pigmeos usan las energías diferentes para el bien común. El requisito básico es la confianza.

 

1. 1. Autoestima y solución constructiva de conflictos. Piensan que los conflictos son inevitables, si bien pueden resolverse si cada uno se hace responsable del resultado. Cada uno tiene el deber de intentar hacerlo, y el derecho de llamar a otros si falla. Hay que abordarlos apenas se presentan.

 

1. 1. Conexión. Participar es base de la cultura pigmea. Cada uno lo espera, lo pide, y lo da. El poder se reparte en forma pareja. Cada uno tiene el mismo peso en las opciones. Mantienen su conexión.

 

1. 1. Espíritu de familia. Entre pigmeos, cooperar es el eje. En la caza se juntan las redes de cada familia en semicírculo. Las mujeres y los niños empujan a los animales hasta la red, y los hombres del otro lado, los matan. Para lograr ese fin, hay que articular las metas y el método de trabajo.

 

1. 1. Un credo común. Tienen valores y creencias compartidos. Desde la infancia asumen reglas de conducta, transmitidas de boca en boca. Sancionan a quien rompe esas reglas..

 

1. Todos son líderes. Los pigmeos creen en el liderazgo “repartido”. No hay “grandes hombres”: no hay un “líder” ni la última palabra. Algunas opiniones prevalecen, cada uno desafía a la “autoridad”. Por eso, cada uno toma como propias las decisiones.

 

Aprovechar estas lecciones nos hace apreciar la sabiduría de lo humilde.

 

Los verdaderos problemas de nuestra escuela

 

 

 

 

Un problema grave en la Argentina son las carencias  educativas son un problema serio en la Argentina. ¿Qué son? Es lo que se enseña o no, y se aprende, o no en las escuelas. Aun los que completan un ciclo escolar, tienen trabas para leer en voz alta y  comprender un texto. Si se les pide analizar  ese texto, quedan perplejos y no atinan a responder.

 

Tampoco saben escribir de modo cabal en castellano, atentos a la ortografía, la gramática, la sintaxis. No conocen la geografía argentina. No saben en qué país viven. La cultura que da la escuela  es confusa. Tampoco se conoce bien la Historia del hombre, ni la Historia del país. Ahora se insiste en la memoria de eventos, de tipo ideológico, si bien eso no es historia.

 

Se ignora que los derechos humanos no son un invento del s. XVIII, que hay un derecho natural, y que existe un derecho de gentes que fue elaborado por teólogos de Salamanca en el siglo XVI y que es la base de todo el orden internacional actual.

 

¿Cómo se enseñan los temas del sexo? A los chicos se les dice que el sexo es un juego, se les explica que hay que cuidarse y se les reparten contraceptivos y condones. En algunas partes se  fomenta la homosexualidad.

 

Una laguna clásica es la religión. Dios sigue excluido, prohibido en la escuela. Estas lagunas nos deben preocupar. Es básico contar con un buen sistema educativo, del cual depende la Argentina futura. ¿Qué se va a enseñar y  qué se enseña hoy? ¿Cómo se ejercerá el derecho a la libertad de educar? ¿Podrán los padres  ejercer ese derecho? ¿O deberán aceptar que el Estado imponga a sus hijos la idea única?