Amor sin egoísmo
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Mientras existe el deseo de estar unidos, esto hace que se realice la más pura
esencia del amor. Jamás se dice con tanto corazón y tanta libertad a la persona que
uno ama en serio: “Que bueno que existas”. ¿Quién va a cuidarte cuando estés
enfermo, si no la persona a la cual quisiste desde la juventud?
Es cierto que quizá el amor a los hijos es el amor más fuerte, porque sabe que no
tiene nada que esperar. Es una honra encontrar en los hijos la misma ingratitud que
tuvimos para nuestros padres. Así se llega a la perfección del amor, igual que Dios, sin
ninguna clase de egoísmos. El amor, tanto del padre como de la madre, está siempre
mezclado con otros elementos como la preocupación y el miedo.
